Rovaniemi es la capital de la región de Laponia en Finlandia. Los extremos climáticos parecen llevarse bien con Rovaniemi: la nieve se mantiene durante 180 días al año (de noviembre a abril) y el sol nunca se oculta entre junio y julio. Asimismo, Papá Noel es un icono de esta región finesa.
El plano urbanístico en forma de curenos no podía ser de obra de otro más que del magnífico arquitecto finés Alvar Aalto, que también ha construido en la localidad un complejo arquitectónico notable. Los museos, especialmente, el Arktikum, o el centro urbano sirven de complemento a las pistas de esquí, las excursiones en moto de nieve o trineo, y la visita a la casa de Papá Noel ubicada sobre el Círculo Polar Artico.
La 2ª Guerra Mundial destruyó Rovaniemi. Después, la reconstrucción llevó a Alvar Aalto que dejó alguna perla arquitectónica como la que se puede contemplar entre las calles Halituskat y Jorma Eton tie, al lado la estación de tren. Allí, se ubica Lappia-talo, un complejo formado por sala de congresos y conciertos; una biblioteca pública; y el Kaupunki Rakkenutaaa o el Ayuntamiento.
Sin embarog, en las últimas décadas los gustos de carácter masivo se están poniendo de moda en esta localidad finesa. Descendiendo por Koskikatu hasta el río, se podrá contemplar uno de los iconos actuales de la ciudad, el puente Jätkämkyntillä que une el centro urbano con los barrios que se extienden bajo el centro de deporte invernal de Ounasvaara.
El otro símbolo de Rovaniemi es Arktikum keshus, un centro cultural con un alargada forma acristalada, un conducto al interior del Artico, un espacio donde se pueden admirar los pilares de la cultura sami. También alberga el Lapin maakuntamuseo, dedicado a la evolución histórica de la ciudad y la cultura sami en Finlandia.
Finalmente, hay que ver el Taidemuseo ( museo dedicado al arte moderno finlandés), la iglesia luterana y la línea del Círculo Polar Artico.
Foto vía El Blog de Rovaniemi
