Aviñón está ubicada en una curva del río Ródano, a unos 95 kilómetros de Marsella y a 653 de París. Esta ciudad francesa es conocida como ”La ciudad de los Papas” pues fue la residencia oficial de los Papas entre 1309-1377.
A pesar de sus formidables monumentos medievales y su puente, famoso por la canción de cuna, se trata de una ciudad dinámica y próspera más que una pieza de museo.
En 1309, Clemente V un Papa francés, se fugó de Roma hasta Aviñón escapando de la agitación política. En 1335, el tercer Papa de Aviñón, Benedicto XII, comenzó la construcción del fortificado Palais des Papes que se alza sobre el río Ródano en tanto que éste pasa bajo el Pont d’Avignon. Las obras se concluyeron un par de décadas después durante el Papado de Clemente VI.
El Palais des Popes está dividido por el Gran Patio, que a un lado del edificio es austero mientras que al otro mantiene muestras del estilo de vida lujoso y laico de Clemente VI. El palacio fue profanado durante la Revolución Francesa y sus tesores fueron saqueados. No obstante, todavía podemos ver las dimensiones de las habitaciones, los frescos y los mosaicos.
Cerca del palacipo Papal, se encuentra la catedral de Notre-Dame-des-Doms, un edificio romántico parcialmente reconstruido en el siglo XV. A poca distancia se halla el Petit Palais, donde vivían el Papa y su entorno antes de la edificación del Palais des Papes. Actualmente, en el Petit Palais se puede presenciar una magnífica colección de pintura italiana del primer Renacimiento, entre la que sobresale la “Virgen con el Niño” de Botticelli.
Desde las murallas bajas de la ciudad se llega al puente Saint-Benezet, conocido como Pont d’Avignon. Fue erigido en el siglo XIV, mas se derrumbó en el siglo XVIII. Pese a ello, todavía se puede caminar sobre sus restos. Asimismo, se puede visitar el Musée Calvet, las murallas medievales, la iglesia de Sant Pierre y el Ayuntamiento.
Foto vía Historia General
