Tokaj es la región vinícola más conocida de Hungría. Además, tiene fama mundial por su vino blanco y, sobre todo, por sus sabrosos vinos dulces. El rey francés Luis XIV afirmó con rotundidad que Tokaj era “el vino de los reyes y el rey de los vinos”. Si estás en Budapest te recomiendo visitarla pues se llega rápidamente tanto en coche como en ferrocarril.
Tokaj es una singular y pequeña localidad ubicada a los pies de las montañas Kopasz, en tanto que las colinas Zemplén se sitúan al norte y los ríos Tisza y Bodrog al sur. Las colinas Zemplén son volcánicas y los otoños resultan más bien suaves, lo que explica que esta región produzca vinos tan sobresalientes desde el siglo XVII.
A diferencia de Egger (la principal ciudad del norte húngaro y conocida or sus vinos tintos, como el Egri Vikavér) Tokaj solamente fabrica vinos blancos. Pese a ello tiene fama mundial por la gran calidad y el espléndido sabor de sus vinos dulces. Y no sólo actualmente sino desde hace varias centurias.
Así, la región de Tojak elabora varios tipos de vinos blancos. El Hárlesvelü es posiblemente el más seco, sin embargo, el Furmint es el más típico. El Szamorodni puede ser seco o dulce y es un vino parecido a un típico jerez. El Aszú está elaborado con las uvas que maduran más rápidamente. El Aszú Esszencia es el rey de los vinos y presenta un sabor bastante delicioso, toda una joya.
En definitiva, existen 28 pueblos y ciudades en la región vinícola de Tokaj, que se extiende por las laderas sur y este de la cordillera Zemplén. A lo largo de toda esta región, hay viñedos privados y bodegas que ofrecen catas de vino. Por último , la Unesco ha declarado a esta región magiar como Patrimonio de la Humanidad al considerarla un paisaje cultural e histórico.
Foto vía Vinos Tokaji