Kiruna pertenece a la provincia de Lapland y es la ciudad más septentrional de Suecia. Cuenta con un moderno aspecto pues se creó en 1900, sobre un enclave lapón, para explorar los ricos yacimientos de hierro de la zona, de los cuales se extraen unos 20 millones de toneladas actualmente.
Su clima es duro debido a que está a 149 kilómetros del Círculo Polar Artico, se encuentra cubierta de nieve de octubre a mayo. El fenómeno del “sol de medianoche” se ve desde el 31 de mayo hasta el 18 de julio. El término municipal de Kiruna es el segundo mayor del mundo, con unos 20.000 kilómetros cuadrados, y en él residen más de 30.000 habitantes.
Kykran, su iglesia, ubicada en el centro de la ciudad, es un gran edificio de madera. Fue erigido en 1912 con forma de tienda lapona siguiendo un proyecto de Gustaf Wickmann. La portada y su interior están adornados con unas preciosas estatuas creadas por Christian Eriksson. La torre de la iglesia data de 1907.
En el parque, existe un monumento dedicado a Hjalmar Lundbolhm quien fue el fundador de la ciudad y uno de los pioneros de la explotación minera de la zona. También hay que ver la casa parroquial de madera que realizo Wickmann en 1913.
Además, destaca el moderno y monumental Ayuntamiento, el Stadhuset, proyectado por Artur Von Schmalensee en 1963. Cuenta con una torre, un carillón de 23 campanas que toca arias compuestas expresamente por W.W. Glaser. En el interior, existen algunas salas revestidas de madera, tapices y esculturas.
Por otra parte, se puede acudir a la Kirunavaara, un colonia situada al sur de la ciudad y riquísima en magnetita. Su nombre quiere decir literalamente la gran mina. Se conoce desde finales del siglo XVIII y al principio medía 749 metros de altura. En la actualidad, dos carriles la suben para explotarla a cielo abierto y en su interior hay una red de carriles de vía estrecha de unos 73 kilómetros.
Foto vía Sweden.se